Patrimonio cultural
El Patrimonio Cultural en el Parque Nacional El Leoncito se conforma por bienes materiales, como por conocimientos y prácticas vinculadas a los usos del lugar en distintos momentos de la historia. Se encuentran las manifestaciones culturales que corresponden a las primeras ocupaciones (entre 8.000 y 8.500 años antes del presente) como los grabados rupestres ubicados al norte del Arroyo El Leoncito con motivos zoomorfos (suri, guanaco, perro, gato), abstractos o macriformes, o aquellos identificados en la naciente del arroyo mencionado o en el cordón de las Cabeceras.
Hasta esa zona llegó el dominio o influencia Inca como también grupos étnicos reconocidos como huarpes. Las investigaciones arqueológicas indagaron fragmentos de cerámicas, material lítico como lascas y raspadores, y un sitio ceremonial de altura que corresponden a este período.
En los últimos siglos XIX-XX, en la zona funcionó la Estancia El Leoncito. Esta unidad productiva agrícola ganadera formó parte de un conjunto de estancias ubicadas en la cordillera de los Andes y zona limítrofe con Chile, como un lugar de intercambio de mercaderías en ambas direcciones. Actualmente, algunas de las estructuras edilicias que funcionaron en este periodo son identificadas como patrimonio cultural ya que evidencian un proceso histórico de ocupación y uso del territorio como también los vínculos entre las poblaciones y su entorno.
Además, los pobladores y pobladoras vecinos al Parque Nacional, mayoritariamente ubicados en la localidad de Barreal, fueron también trabajadores y pobladores de esta estancia hasta la creación del área protegida. En este sentido, los saberes y conocimientos del espacio como también los usos e historias de las estructuras materiales que hoy perduran, son reconocidas como patrimonio cultural por tales poblaciones.