En el marco de la operación de vigilancia y control de los espacios marítimos denominada “Mare Nostrum I”, y en coordinación con la Dirección Nacional de Política Exterior Antártica, recientemente se realizó un vuelo de vigilancia y control sobre la Península del Continente Blanco y las Islas Orcadas del Sur.
La misión tuvo como objetivo, garantizar el cumplimiento de las disposiciones de la Convención sobre la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos, conforme a lo establecido en el Artículo XXIV de la Ley N° 22.584.
Dicha operación fue llevada a cabo por una aeronave P-3C Orion, perteneciente a la Escuadrilla Aeronaval de Exploración y de la Aviación Naval Argentina de la Armada, que despegó en horas de la mañana desde la Base Aeronaval ubicada en Río Grande.
Cabe destacar que, durante su recorrido, la aeronave sobrevoló la Península Antártica y posteriormente las Islas Orcadas del Sur, donde detectó la presencia de trece embarcaciones, entre ellas diez buques pesqueros del tipo arrastre, procedentes de Noruega, Ucrania, China, Corea y Chile, así como tres buques logísticos de Panamá, China y Países Bajos.
El vuelo de se extendió por aproximadamente nueve horas, con una permanencia de una hora y media en el área de las Islas Orcadas, en este sentido, el P-3C Orion regresó a su punto de partida (la Base Aeronaval de Río Grande), en horario nocturno.
El titular del Comando Conjunto Marítimo, organismo responsable de estas operaciones, el contraalmirante Rodolfo Eduardo Berazay Martínez supervisó personalmente las tareas que se llevaron a cabo acompañado por el comandante de la Aviación Naval, comodoro de marina Román Enrique Olivero; y el director nacional de Política Antártica, ministro Fausto Mariano López Crozet.
El Comando Conjunto Marítimo cumple un rol clave en el ejercicio de los derechos soberanos, garantizando la protección de los recursos naturales del mar monitoreando el cumplimiento del marco legal vigente en las áreas marinas protegidas.
Este tipo de acciones reafirman el compromiso del Estado Nacional, mediante la vigilancia y el control de las aguas jurisdiccionales, con la preservación de los recursos vivos marinos antárticos, garantizando de esta manera la alerta temprana y fortaleciendo el sistema de Defensa Nacional.