Aplicaciones en el área de la salud
Los radioisótopos en medicina nuclear tienen dos usos fundamentales:
Diagnóstico
Se usan los isótopos radiactivos de elementos como el Carbono, el Iodo y el Molibdeno para conocer el funcionamiento de determinados órganos. Se los denomina “trazadores”.
Luego de ser administrados al paciente –por vía oral o endovenosa– generan un contraste que permite la obtención de una serie de imágenes con cámara gamma o tomógrafo por emisión de positrones (PET).
Las principales aplicaciones de estas técnicas están relacionadas con la detección del cáncer en tiroides, hígado, vesícula, intestinos, corazón y pulmón, entre otros.
Tratamiento
Las radiaciones ionizantes se utilizan para destruir lesiones cancerosas. Para ello, se expone el tumor a dosis procedentes de fuentes de radiactividad externas (equipos de rayos X, radioterapia con fuente de cobalto-60) o internas (braquiterapia, radioterapia metabólica).