Trasplante de células de la médula ósea
Muchas personas, adultos y niños, requieren un trasplante de médula ósea para curarse de enfermedades hematológicas e inmunológicas, como la leucemia y la anemia aplásica.
Es el procedimiento por el cual se infunden CPH sanas para que una persona con enfermedades de la sangre pueda regenerar sus células normales y volver a producir células sanguíneas propias.
Tipos de Trasplante
- Autólogo: es un autotrasplante mediante el cual se infunden células criopreservadas.
- Alogénico: cuando no es posible el autotrasplante, se indica la realización de un trasplante alogénico. Para concretarlo es necesario contar con un donante 100% compatible genéticamente. Puede ser familiar o un donante no relacionado.
¿Cómo es el trasplante de CPH?
En una primera etapa, al paciente se le destruyen las células enfermas mediante tratamientos que combinan quimioterapia y/o radioterapia. A continuación, se infunden al paciente las células extraídas del donante. Finalmente, en un plazo relativamente corto, las células madre donadas reemplazan a las células madre enfermas y comienzan a producir células sanguíneas propias.
Tener en cuenta
No hay lista de espera para trasplante de CPH. Todos los pacientes tienen la misma prioridad y sus búsquedas se realizan simultáneamente. Todo el tiempo ingresan nuevos donantes a la red mundial.
Si al momento de la búsqueda no se encuentra donante compatible, el Registro continúa con la búsqueda activa. La búsqueda finaliza solo cuando el médico cierra el proceso.
Desde 1997 se realizan en Argentina trasplantes de CPH con donante no emparentado, por lo que existen equipos médicos altamente capacitados para llevar adelante esta práctica. Las obras sociales, los sistemas de medicina prepaga y el sistema público a través de subsidios provinciales o nacionales del Sistema de Salud y Desarrollo Social permiten que todas las personas puedan acceder a un trasplante de CPH.