Hepatitis B
¿Qué es la hepatitis B?
Es la inflamación del hígado causada por el virus de la hepatitis B, que se transmite por el contacto con sangre contaminada, por contacto sexual, transmisión vertical (de la persona gestante al feto), por transfusiones de sangre o por uso de drogas endovenosas con material contaminado.
Las personas inmunocomprometidas y las infancias tienen mayor riesgo de que al contraer la enfermedad, ésta persista de forma crónica y, provoque daños en el hígado (enfermedad conocida como cirrosis) o cáncer.
¿Cuáles son los síntomas?
Algunas personas infectadas no se sienten enfermas. Otras tienen síntomas que pueden durar varias semanas, e incluyen:
- pérdida de apetito,
- cansancio,
- dolores en los músculos, las articulaciones o el estómago,
- diarrea o vómitos,
- con menos frecuencia, piel u ojos amarillos (ictericia). Esta es la forma "aguda" de la hepatitis B.
¿Cómo te protege esta vacuna?
La vacuna previene la hepatitis B y las graves consecuencias que esta enfermedad genera como el cáncer de hígado.
Estrategia de vacunación
- Una dosis neonatal: personas recién nacidas dentro de las primeras 12 horas de vida.
Si por cualquier motivo, la persona recién nacida no hubiese recibido la vacuna dentro de ese lapso, debe recibirla tan pronto como sea posible.
Además, esta vacuna se encuentra incluida en la quíntuple que se aplica:
- 1era dosis: a los 2 meses de vida
- 2da dosis: a los 4 meses de vida
- 3era dosis: a los 6 meses de vida
- Refuerzo: entre los 15-18 meses de vida
Desde 2012 es obligatoria y no requiere orden médica para todas las personas de cualquier edad. Quienes no estuvieran vacunados/as o tienen que completar las dosis faltantes, deberán recibir el siguiente esquema:
- 1era dosis: desde los 11 años en adelante
- 2da dosis: al mes de la 1er dosis
- 3era dosis: a los 6 meses de la primera dosis, aplicar la tercera y última.
También podemos evitar el contagio con los siguientes hábitos saludables:
- no compartir los objetos personales con otras personas (cepillos de dientes, alicates, agujas, etc.).
- utilizando métodos de cuidado de barrera durante las relaciones sexuales, que además ayuden a prevenir otras infecciones de transmisión sexual.
- en el caso del personal de salud, cumplir con las medidas de bioseguridad.