La Administración de Parques Nacionales actualizó su Política de Gestión del Patrimonio Cultural a través de un nuevo documento que reúne la experiencia acumulada en las últimas dos décadas por sus equipos técnicos y adecúa la normativa interna a la legislación nacional vigente en la temática y a los acuerdos internacionales adoptados por el país durante este periodo.

En el texto actualizado destaca el concepto base sobre el que se trabajará en el organismo: la definición de Patrimonio Cultural considera los bienes materiales, los paisajes, las prácticas y los conocimientos que forman parte de la memoria colectiva, la identidad y/o la historia de los diversos grupos humanos y/o comunidades vinculadas a un territorio. Este concepto articula la dimensión material e inmaterial del patrimonio cultural, así como también lo temporal y lo espacial.

Además, define un conjunto de principios rectores que se articulan de manera transversal y guían la gestión del patrimonio cultural en la formulación de estrategias, planes, proyectos y actividades. Estos principios permiten abordar la multidimensionalidad del Patrimonio Cultural. La gestión de este Patrimonio debe ser planificada, incluyendo el trabajo conjunto entre las distintas instancias del organismo. Estas tareas pueden resumirse en las siguientes etapas: el relevamiento inicial, la evaluación diagnóstica, la asignación de valor, su inventario, el monitoreo o actualización y la evaluación como última etapa. Dichas fases son consecutivas y complementarias, lo que hace que el proceso de gestión del patrimonio cultural pueda ser visto como un círculo virtuoso estrechamente asociado a la planificación y/o toma de decisiones.

La nueva normativa le permite a la Administración de Parques Nacionales contar con una herramienta analítica y de gestión actualizada, coordinada y ajustada a los estándares institucionales, así como también nacionales e internacionales. La siguiente etapa de este proceso de trabajo será la actualización del Reglamento para la Conservación del Patrimonio Cultural, a concretarse en los próximos 12 meses, y posterioridad se deberán iniciar una serie de cursos para fortalecer las capacidades institucionales en la aplicación de la nueva normativa.

De esta manera, luego de un año y medio de intenso trabajo por parte del equipo de Patrimonio Cultural de la Dirección Nacional de Conservación, esta actualización posiciona a Parques Nacionales a la vanguardia en materia de conservación del Patrimonio Cultural.