La Superintendencia celebra su 85° aniversario
Realizamos un breve recorrido por la historia del Organismo en el marco de un hecho histórico tan importante como el que hoy nos convoca.
La Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) nace en 1937, año que queda muy lejos en la historia y que sin embargo posee puntos de encuentro con nuestra actualidad. Hoy, la SSN cumple 85 años desde su fundación; en esta nota realizamos un breve recorrido de nuestra historia como organismo.
La crisis del 29 había puesto en jaque al mercado y el viejo continente estaba a las puertas de un nuevo conflicto bélico que pronto derivaría en una conflagración mundial. Asimismo, en nuestro país la élite conservadora buscaba mantener sus privilegios mediante el fraude electoral y no reconocía el irrefrenable avance de la lucha por los derechos de los trabajadores.
Ante esta compleja situación, el Estado comenzó a intervenir fuertemente en la regulación y organización social al tiempo que se convirtió en el motor de la reactivación económica.
Como reflejo del papel intervencionista del Estado, en 1935 se creó el Banco Central, cuyo papel regulador se profundizaría luego de su nacionalización en 1946. Además, gran parte de las actividades económicas productivas pasaron a ser controladas por diversas juntas e institutos (junta de carnes, granos, del vino, de la yerba mate, etc.).
En 1936, distintas aseguradoras no pudieron hacer frente a sus obligaciones y presentaban una desconfianza generalizada en la sociedad respecto de la actividad aseguradora. A raíz de estos acontecimientos, el 21 de junio de 1937 se decretó la creación de la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) como institución autárquica, destinada a supervisar el sector.
A lo largo de su historia, la SSN acompañó el desarrollo económico y social de nuestro país. Esto se puede ver reflejado en la sanción de las diversas normas que marcaron grandes hitos en la historia del seguro argentino, como por ejemplo: Ley 17.418 (1967) sobre contrato de seguro; Ley 20.091 (1973) de entidades de seguros y su control; Ley 22.400 (1981) régimen de los productores asesores de seguros; Ley 24.557 (1995) de riesgos del trabajo; Ley 25.246 (2000) sobre lavado de activos de origen delictivo; y Ley 27.348 (2017) complementaria de la Ley de riesgos del trabajo.
En la actualidad, la ampliación de derechos dice presente en la agenda de trabajo de la SSN. Las cuestiones de género, la inclusión de las minorías y los colectivos que históricamente fueron desatendidos por el mercado asegurador, hoy toman un lugar central a la hora de definir nuevas políticas públicas.
Como prueba de ello se encuentra la promoción de los seguros inclusivos o microseguros, en cumplimiento de la estrategia de inclusión financiera que impulsa el gobierno nacional, o también la reapertura del Departamento de Orientación y Asistencia al Asegurado (DOAA), espacio de vital importancia para el asegurado donde se destaca la centralidad que se le asigna a su cuidado y atención.
Adicionalmente, las transformaciones tecnológicas tienen el potencial de mejorar la administración del seguro, pero también entrañan riesgos potenciales que se deben anticipar y controlar.
De más está decir que el mercado asegurador puede hacer mucho para dar previsibilidad en un mundo tan cambiante a través de la creación de soluciones para moderar el impacto del cambio climático, ayudar a la promoción social y la sostenibilidad.
Al presente, los desafíos nacionales y globales también son abrumadores e inminentes, por lo que imaginar nuevas soluciones que garanticen una mejor calidad de vida para las futuras generaciones es más que necesario.
Inspirados por los creadores de la SSN, que en su momento se animaron a una solución novedosa que contribuyó a mejorar la reputación del mercado asegurador y garantizar su solvencia, 85 años más tarde renovamos nuestros esfuerzos para que, desde cada puesto de responsabilidad, enfrentemos los retos de nuestro tiempo y contribuyamos al constante fortalecimiento de esta institución y del mercado asegurador.