La Secretaría de Derechos Humanos señalizó como sitio de memoria el Cementerio Municipal Santa Mónica
En este cementerio fueron enterradas víctimas del terrorismo de Estado de forma clandestina durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983) y antes de esta.
La Secretaría de Derechos Humanos, a través de la Dirección Nacional de Sitios y Espacios de Memoria de la Subsecretaría de Promoción, junto con la Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, señalizó el Cementerio Municipal Santa Mónica, en Merlo. Del acto participaron, también, organismos de derechos humanos locales.
Según consta en el Archivo Nacional de la Memoria y en causas judiciales, los secuestros y asesinatos de las personas perseguidas por su militancia política, social y sindical fueron efectuados durante 1976 y 1977. Asimismo, existen registros de dos homicidios antes del golpe de Estado del 24 de marzo. Cinco de las víctimas que fueron identificadas habían sido asesinadas en la localidad de Castelar el 26 de junio de 1977, en el marco de un enfrentamiento fraguado, y sus restos fueron inhumados como NN en este cementerio. Actualmente se encuentran en curso causas judiciales que permitirían la identificación de un mayor número de personas.
Algunas de las víctimas habían permanecido secuestradas en centros clandestinos de la provincia de Buenos Aires, tales como “La Cacha”, Comisaría 1ª de Bahía Blanca, la Unidad Penal 4 de Villa Floresta (regional – Bahía Blanca) y la Comisaría 3ª de Morón, entre otros.
El trabajo del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) permitió la recuperación de la identidad de algunas de las mujeres y los varones inhumados en este cementerio.
La señalización de los ex centros clandestinos de detención y de otros lugares donde sucedieron hechos emblemáticos durante el terrorismo de Estado, a través de la Ley Nacional N° 26.691, los hace visible y expresa en el espacio público el compromiso del Estado democrático de dar a conocer y condenar los delitos allí cometidos, acompaña el juzgamiento de sus responsables y efectiviza el reconocimiento hacia las víctimas y sus familiares.