El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Martín Soria, encabezó una recorrida por el Complejo Penitenciario II de Marcos Paz, en la que estuvo acompañado por la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y el intendente municipal de Marcos Paz, Ricardo Curutchet. También participaron la interventora del SPF María Laura Garrigós y el secretario de Justicia Juan Martin Mena.

En ese marco, certificaron los avances de obra en el hospital modular del Complejo, que forma parte del plan de prevención de crisis sanitarias en cárceles desarrollado entre los ministerios de Justicia y de Obras Públicas, que incluye la construcción de hospitales de esta naturaleza en 10 cárceles federales y en 17 complejos provinciales en 8 provincias de nuestro país.

Los hospitales modulares brindan asistencia primaria de salud y están dotados de electrocardiógrafo, equipo de rayos X rodante digital, ecógrafo portátil y carro de paro con cardiodesfibrilador.

El ministro Soria expuso que "al evitar los riesgos y el gasto de recursos de seguridad que implican los traslados por motivos sanitarios, el funcionamiento de estos hospitales generan un beneficio a la sociedad, ya que descongestionan los centro de salud extra-carcelarios".

Plan Qunita/Sueño Seguro

Vizzotti, Curutchet y Soria recorrieron el taller de carpintería que funciona en el Módulo 1. Allí, los internos comenzarán a fabricar las cunas que forman parte del kit del Plan Qunita. Y visitaron también el Módulo 5, donde se realizará el embalaje y almacenamiento de los kits.

El acuerdo supone la producción de 2000 kits por mes durante 3 meses, escalando luego mil kits por mes hasta llegar a 8000.

Un dato central a tener en cuenta es que el resto del kit del Plan Sueño Seguro (colchón, sábanas, frazadas y ropa para bebe y mamá) se producirán en los talleres textiles del Complejo Penitenciario de Ezeiza.

“Esta iniciativa permite, por un lado, que los internos participen la reactivación del Plan Qunita, que el gobierno anterior y la Justicia desmantelaron. Pero además, aprenderán un oficio, generando más reinserción laboral y reduciendo la reincidencia. Es decir, estamos dando trabajo y, sobre todo, seguridad”, afirmó Soria.

Vacunación

En el Complejo Penitenciario II de Marcos Paz, todo el personal recibió las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19, como así también el 90% de los internos.

Esa situación se enmarca en el Plan Estratégico Integral de Salud en el Servicio Penitenciario Federal para 2021-2023, que Soria y Vizzotti pusieron en marcha en junio pasado. Los mismos funcionarios habían iniciado la vacunación de los agentes del SPF en marzo de 2021, tras un acuerdo interministerial que permitió incluirlos como población estratégica y esencial.

Además, hace dos semanas se realizó un operativo conjunto entre el Ministerio de Salud y el Servicio Penitenciario Federal para ofrecer la vacuna en espacios de visita en unidades penitenciarias del AMBA, aplicándose un total de 334 dosis.

"Durante el período de Gobierno anterior, brindar salud en las cárceles era casi un sacrilegio. Nosotros nos encontramos en las antípodas y por eso le dijimos sí a una política pública integral que había comenzado en 2012 y que fue discontinuada", explicó Soria y añadió que "hoy se ven los resultados de esa decisión: en Marcos Paz hace más de un mes que no hay casos nuevos de COVID, y prácticamente ya no queda nadie por vacunar".