Durante sus exposiciones, ambos reflejaron de manera técnica el cuadro de situación Institucional y las estrategias llevadas adelante, destacando que el valor más importante que tiene la institución, es la calidad humana y profesionalismo del personal.

En ese marco, se resaltó la escena del agente penitenciario como actor fundamental para la protección de la sociedad, frente al crimen organizado que delinque desde los establecimientos Penitenciarios.

Además, expusieron frente a los distintos sistemas penitenciarios la importancia en materia de inteligencia penitenciaria, su evolución y los desafíos en el contexto actual frente al crimen organizado que delinque desde los establecimientos penitenciarios. También durante sus intervenciones, ambos funcionarios destacaron el papel del personal penitenciario en la toma de decisiones resaltando la influencia del Inspector General Roberto Pettinato, quien aportó los marcos normativos y la evidencia empírica que transformó la gestión institucional en materia de formación penitenciaria.

Por último, reflejaron que un saldo pendiente a nivel nacional es la falta de continuidad en las políticas penitenciarias debido a los cambios de gobierno, junto a la necesidad de un liderazgo firme que brinde un claro acompañamiento institucional para el personal.

Asimismo, los dos coincidieron en la importancia del trabajo articulado entre las diferentes áreas junto al desarrollo de instrumentos de clasificación y categorización de internos, orientados a gestionar de manera eficaz los recursos y las necesidades de seguridad.