Puerto Belgrano – Ayer por la mañana, frente al dique de carena Nº1, se llevó a cabo la ceremonia conmemorativa por el 116º aniversario del Arsenal Naval Puerto Belgrano (ARPB).

El Jefe del ARPB, Capitán de Navío Néstor Darío Peretti, presidió la ceremonia. Estuvieron presentes personal militar y civil del destino.

Tras el ingreso de las autoridades y el saludo al personal formado, se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino. A continuación, el Capitán de Corbeta Guillermo Manfredi pronunció palabras alusivas donde resaltó la importancia de la construcción de un Arsenal de semejante magnitud y realizó un recorrido histórico por los primeros años de existencia del mismo hasta nuestros días.

“Si existe una característica en que se destaca el Arsenal Naval Puerto Belgrano es en adaptarse a los desafíos y paradigmas cambiantes con la constante capacitación y auténtico compromiso de sus operarios e ingenieros quienes, con profesionalismo e ingenio, intervienen en el sostén logístico de las unidades de la Flota de Mar, la Aviación Naval y la Infantería de Marina”, continuó.

Y agregó que: “Todo lo mencionado sobre lo que este destino pudo lograr en grandeza de la Patria y de la Armada Argentina, fue gracias a su personal y al compromiso que éste siente en cada uno de sus puestos de trabajo. De esta manera, el ARPB provee, hace más de un siglo, la misma calidad de asistencia para contribuir y asegurar la capacidad operativa de los componentes del poder naval”.

“Desde sus orígenes –prosiguió– y durante toda su evolución, su historia nos cuenta cómo, civiles y militares, unen sus habilidades profesionales detrás de un objeto que trasciende el marco local y se engarza en políticas de Estado que terminan involucrando al país en su conjunto”.

Para finalizar, dedicó palabras al personal: “Cada uno de ustedes sabe que puede estar orgulloso de realizar en su departamento o taller. Por eso es justo hoy, en un nuevo aniversario de nuestro querido Arsenal, rendir homenaje a aquellos que hacen posible lo imposible”.

Concluida la alocución, se dio por finalizada la ceremonia.