El encuentro, llevado a cabo en la sede ministerial, permitió analizar el funcionamiento de los mecanismos de cooperación judicial existentes entre Argentina y España. En ese marco, Soria le expuso a Alonso Jiménez todas las herramientas con las que cuenta el Estado Nacional para la persecución conjunta del crimen organizado transnacional, haciendo especial énfasis en el Tratado de Extradición y Asistencia Judicial en Materia Penal suscripto en 1989, así como los mecanismos específicos de intercambio de información.

En ese sentido, Soria resaltó que “la criminalidad organizada, como el narcotráfico y la trata de personas, no conoce de fronteras. Los Estados tienen herramientas para trabajar conjuntamente en la persecución de esos delitos, que requieren de una aceitada coordinación entre las autoridades. Afortunadamente, la fluida relación entre los actuales gobiernos de Argentina y España nos permite llevar a cabo esta clase de encuentros para seguir perfeccionando los mecanismos vigentes”.

Alonso Jiménez, por su parte, coincidió en la importancia de la colaboración entre ambos países, y señaló los importantes avances que se realizan en el marco del intercambio de infomacion en materia de crimen organizado y tráfico de estupefacientes, con especial significación de la colaboracion con jueces y fiscales argentinos, en asuntos de auxilio judicial y extradiciones principalmente. Igualmente conviene destacar las excelentes relaciones con la Fiscalia especial antidroga de Argentina, obteniendo, en materia y procedimientos operativos, altos niveles de eficacia, con intervención igualmente de jueces y fiscales de España.

Por último, Soria y Alonso Jiménez analizaron el estado de situación del sistema de justicia en la Argentina y de las reformas impulsadas por el Poder Ejecutivo Nacional para la mejora del funcionamiento de la Justicia. En ese sentido, Soria y Alonso Jiménez coincidieron en la importancia de incorporar la perspectiva de género en la administración de justicia.

Para finalizar, Soria afirmó que “desde el Ministerio de Justicia y DDHH estamos trabajando fuertemente en el impulso de las reformas que propuso nuestro Presidente. En otro momento de nuestra historia, gracias al juzgamiento de las causas de lesa humanidad, la Justicia argentina supo ser un ejemplo a nivel internacional. En los últimos años, lamentablemente, ese prestigio se dilapidó y hoy tenemos un Poder Judicial que no conforma a su propia ciudadanía. Debemos trabajar para devolverle esa legitimidad”.