Advertencias sanitarias
Se encuentra disponible en el Boletín Oficial la Resolución 3499/2021, que determina la renovación de las Advertencias Sanitarias antes de junio de 2022.
Para más información comuníquese a [email protected].
En 2003, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco. En el artículo 11° se establece la implementación de advertencias sanitarias con imágenes en todos los productos del tabaco, estrategia que ayuda a disminuir en un 9% el consumo de cigarrillos.
Según la OMS, las advertencias que más se recuerdan son aquellas que incluyen imágenes, ocupan más de la mitad del paquete y están situadas en ambas caras. Además, sugiere que incluyan algún contacto (teléfono o mail) para ayudar a la persona fumadora a dejar de fumar y que se renueven periódicamente (cada dos años) para maximizar su impacto.
Se estima que las personas que fuman visualizan estas advertencias hasta unas 7.000 veces al año, por lo cual se consideran un mecanismo importante para concientizar acerca de los riesgos del consumo de tabaco para la salud. Los/as jóvenes y los/as niños/as también ven estas advertencias. La evidencia científica muestra que las advertencias sanitarias pueden ayudar a que los y las adolescentes y jóvenes no empiecen a fumar y a que las personas fumadoras hagan más intentos para dejar de fumar. La evidencia demuestra que las AS son efectivas cuando exponen de manera explícita los riesgos del tabaco y generan una reacción emocional en la persona que las observa.
La ley nacional de control del tabaco obliga a que todos los productos del tabaco contengan una advertencia sanitaria que incluya en el 50% de una de las caras una leyenda como “Fumar causa cáncer”, “Fumar quita años de vida”, etc.
Y en la cara posterior, ocupando también el 50% de la superficie, debe haber una imagen relacionada y en uno de los laterales un teléfono gratuito de ayuda para dejar de fumar.
Para evitar el acostumbramiento y mantener el efecto para desanimar el consumo de tabaco, la evidencia demuestra que es necesario renovar los mensajes periódicamente, teniendo en cuenta el entorno y la cultura donde se implementan.
Desde que comenzó a implementarse, en Argentina ha habido 4 ediciones de AS. En la última edición se incorporaron nuevas perspectivas, como el tema del perjuicio económico en los gastos de los hogares de personas fumadoras (especialmente en los sectores en mayor situación de vulnerabilidad), y el daño que el tabaco provoca en el medio ambiente.
El impacto de las advertencias sanitarias ha sido medido en diversos estudios en Argentina, que demostraron que estimula a las personas fumadoras a pensar en dejar de fumar y desincentiva a los adolescentes a iniciar el consumo.