El Centro Cultural de la Ciencia C3 cierra el año con las mejores expectativas: en 2018, más de 230 mil personas disfrutaron de propuestas de calidad expresadas en diferentes disciplinas artísticas, las cuales buscaron despertar la curiosidad, el pensamiento crítico, y la belleza que propone la ciencia. Un especial dedicado a repasar lo mejor de la cultura durante 2018.

¿Levante la mano quién es fan del C3?
Estas vacaciones de invierno, la ciencia desterró un mito: 50 mil personas de todas las edades eligieron el C3 como salida y disfrutaron de las mejores actividades en ciencia y arte. Otro año que el público infantil dijo presente para no perderse ninguna propuesta, y la familia acompañó de cerca. 

Teatro
Las artes escénicas pisan fuerte en el C3. Las distintas puestas abordaron temas universales que atraviesan al ser humano con acento en la ciencia. Algunas de las más convocantes fueron:

¡Fuerza Atómica! durante el receso invernal. Una obra de teatro acrobática, que recreó una lucha libre del conocimiento científico, bajo las reglas del catch. La física cuántica, Marie Curie, Albert Einstein, Copérnico, la amenaza tóxica, la radioactividad, entre otros más, se calzaron las máscaras para subir al cuadrilátero y contar breves historias de la ciencia. La obra, dirigida por Cristian Palacios, trató sobre teorías, científicos y problemas entre caídas, porrazos y volteretas.

“Criatura”, adaptación de la novela de Mary Shelley, inspirada en Frankenstein, con la dirección de Miguel Pittier y las actuaciones de Gabo Correa y Vicente Correa. El avance científico y la condición humana fueron los ejes de este clásico universal que cumplió 200 años de su publicación.

En el verano, Cristian Palacios montó “Los Sonámbulos”, sobre un texto inspirado en la novela homónima del húngaro Arthur Koestler y la música de Elvis Presley, el espectáculo para grandes y chicos, versó sobre un viaje cargado de humor y emoción al origen del universo a través de la historia de la ciencia.

Talleres
Las actividades diseñadas especialmente para cada edad, buscaron que, a partir del juego, los conceptos de la ciencia sean más fáciles de entender.

“Clubes científicos” es el sueño de todo niño y niña que le gusta la ciencia. En este sentido, el eje de la propuesta abarcó todos los intereses: para periodistas, constructores, dibujantes, pintores, cocineros, fotógrafos, asquerosólogos, cazadores de sonidos, creadores de energía, inventores y electrojugueteros. El que completaba el cupón de talleres se llevaba un premio.

“Campamento literario” fue una actividad recomendada para los que disfrutaban del ritual de leer con una vuelta de tuerca: la lectura se daba en carpas con bolsillos repletos de libros y guías que acompañaban con canciones, adivinanzas y teatralizaciones. Un plan ideal que se compartió con amigos, primos y hermanos en la ciudad.

 
Los talleres abiertos en el laboratorio son un clásico del C3 y cada temporada cambia la temática. Este año se dieron “Zoom ilustrado: naturaleza y arte” inspirado en un gabinete de curiosidades donde el público apreció minerales, antrópodos, réplicas de fósiles, microorganismos a través de las lentes del microscopio para dibujarlos como solían hacer los naturalistas de antaño; “Zoom Urbano” que proponía conocer de cerca a los insectos más sociales, las hormigas, y cómo vivían en sus colonias; “Zoom: tu plato bajo la lupa”, para conocer qué comemos.

“Enigmas de Laboratorio” se llamó la sala de escape del C3 que se llevó a cabo en el laboratorio. Se trató de una experiencia inmersiva donde los participantes podían jugar a ser científicos por un rato y sortear enigmas, descifrar códigos secretos para dar con la fórmula.

“Proyecto T”, un espacio maker destinado a adolescentes, donde confluían la robótica mecánica y electrónica, la programación de videojuegos y de aplicaciones móviles, el diseño e impresión 3D.

C3 de viaje
El Centro Cultural de la Ciencia C3 armó las valijas y salió de viaje para mostrar la ciencia que producimos localmente. En marzo, en el Centro Cultural del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Washington, Estados Unidos, se presentó “Vistiendo el futuro: Diseñadores argentinos en la frontera del mañana”, una muestra dedicada a la contribución científica y creativa de nuestro país. La muestra en Washington estuvo inspirada en el trabajo conjunto entre diseñadores de indumentaria, científicos y artistas en el marco del mes del Diseño y la Innovación Textil que tuvo lugar en noviembre de 2016 en el C3. Se exhibieron siete prendas resultado del trabajo de duplas conformadas por un científico y un diseñador, y dos instalaciones que invitaron al público a reflexionar sobre los efectos que la era digital tiene en la industria de la moda, y generar conciencia sobre la sustentabilidad medioambiental, el desperdicio y el consumo masivo.

En nuestro país, la muestra “Lugar a Dudas Itinerante” estuvo presente en los Juegos Olímpicos de la Juventud en CABA, y en Villa Constitución, provincia de Santa Fe. También se presentó la muestra de “Neurociencias y Percepción” del C3 en la sexta edición de INNOVA, un espacio destinado para que los chicos y chicas junto a sus maestros experimenten nuevas formas de aprender y compartir conocimiento, con desarrollos tecnológicos vinculados a la educación.

Experiencias colectivas
Dos propuestas invitaron a vivir la experiencia de ser parte de una investigación científica. La iniciativa “A Ciencia Abierta” y la posibilidad de participar de experimentos científicos reales de la mano de investigadores a través de juegos, juegos digitales, encuestas y más, y “Ábrete ciencia”, donde científicos invitados de amplia trayectoria académica compartieron relatos y experiencias.

Encuentros culturales
Una vez más el C3 fue parte de “La Noche de los Museos”, el encuentro cultural gratuito de la ciudad más convocante. Durante toda la noche, los visitantes experimentaron las propuestas científicas más interesantes como la charla “Cocinar es una bella ciencia”, protagonizada por la cocinera Narda Lepes y el divulgador científico Diego Golombek, quienes charlaron sobre mitos y curiosidades que rodean a los alimentos. También, participó en la 44° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires en La Rural con entrevistas a científicos sobre su recorrido en el ámbito de la investigación, y de FILBA Internacional
con charlas en el C3.

Alumnos y docentes pasándola bien
Este año, se recibió la visita de más de 15 mil alumnos de escuelas primarias y secundarias, y se trabajó en la formación docente con 450 educadores. Una camino dinámico para las currículas.

“Noche espacial”
En octubre se vivió una noche única. Más de 1.000 personas fueron testigos del lanzamiento y puesta en órbita del Satélite Argentino de Observación con Microondas SAOCOM 1A. En vivo y en pantalla grande, el público disfrutó del exitoso lanzamiento que marcaría un hito científico.
Además, se realizaron distintas actividades temáticas para toda la familia, que contó con la participación de científicos y científicas de la CONAE, INVAP, VENG y CNEA, los cuales estuvieron involucrados en el proyecto. Una noche donde la ciencia emocionó al país.